El gremio de SUTEBA a través de su página de Facebook responsabilizó a la actual presidenta del Concejo Escolar, Marcela Crespo, por la falta de gestión por un lado, y por otro, la acusó de mentir sobre la real situación que impide que los chicos obtengan una variada alimentación con la carencia de carnes, como por ejemplo: el pollo.
Esta cronista dialogó de manera informal con un padre que manda a su hijo a la escuela de doble escolaridad de la localidad de Ostende. Y el papá manifestó su satisfacción con la institución educativa en cuanto a la formación que recibe el niño. Pero a la hora de hablar de las carencias alimentarias del comedor confirmó: “Sí cada vez que le pregunto a mi hijo sobre qué comieron, responde fideos o arroz”.
A través del acta del trabajo del día del HCD no se especificó por qué Crespo asistió a la Comisión de Educación, presidida por Pedro Elizalde, sin aviso previo. O si fue el resultado de un impulso intempestivo. Recordemos que la Sra. Crespo fue electa como consejera Escolar por la lista de PROPIN.
Al mismo tiempo resulta extraño que los integrantes de la Comisión de Educación, desecharan las denuncias por no tener incumbencia en el tema sin haber dado la participación a otros actores como la inspectora, la directora, o los padres que formularon la denuncia a través de una carta. Es decir se tomó la decisión, sobre una denuncia muy grave, solo con la palabra de Crespo. En la jerga del pueblo se diría: “Se escuchó una sola campana”.
Otras de las cuestiones que no ameritaba el apuro en el tratamiento del tema es que el expediente que contenía la denuncia de los papas, y que en principio obtuvo su pase a archivo, se encontraría en vías de formación en cuanto al contenido de la documentación.
Parte de lo publicado por SUTEBA
“Compañeros: hemos tomado conocimiento que la presidente del Consejo Escolar, se apersonó en el Concejo Deliberante por una denuncia que recibieron allí sobre la comida de una escuela. Lejos de contestar con la verdad, se dedicó a criticar y responsabilizar a la directora. Nunca dijo que por su falta de gestión no hay proveedor de pollo y tampoco parece que lo busca, dado que el producto avícola está desaparecido. Solo grasa picada con algo de carne. La directora tiene la culpa: extinguió los pollos y multiplicó con sus poderes los fideos. Seguramente las demás directoras tienen la culpa de las mesas y sillas que les faltan. La señora todavía no se enteró que es consejera, no concejal, porque pasa más tiempo ensuciando a los docentes en el Concejo, que en su lugar de trabajo, el otro Consejo...”
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