jueves, 26 de diciembre de 2013

Pese a las denuncias y las investigaciones judiciales nada cambia

VENTA AMBULANTE EN PLAYA

Puestos de venta de bebidas, alojamiento de las personas
contratadas
Desde las administraciones municipales se ha impuesto de manera tácita y/o expresa que: “La temporada es el momento de hacerse de dineros cueste lo que cueste y a cualquier precio”. Una manera sería a través de las cometas de espacios públicos publicitarios que las grandes marcas contratan a fin de dejar el sello en el balneario más top de la costa atlántica argentina. Y otro de los artilugios es la venta ambulante en la playa, o en cualquier otro punto de la ciudad. Estas modalidades grotescas y torpe, pero no por ello improductivas, van en perjuicio de todos, y más aún en contra de los sectores más vulnerables. Mientras unos vivos obtienen ganancias de manera escalonada según su rol en la cadena, se observa como funcionarios, y allegados a estos, llenan sus bolsillos de manera oprobiosa.

Días atrás un corresponsal del medio Infosur de Florencio Valera entrevistaba a Alejandro Aguirre, alias “El Japo”. Quien fuera imputado por el delito de trata de persona de menores, por el Juez Alejo Padilla después de las investigaciones realizadas a partir de la denuncia iniciada en la Fiscalía de Pinamar (UFI N°3) a cargo del fiscal Juan Pablo Calderón.




En la entrevista se puso de manifiesto, nuevamente, la vinculación de Aguirre con el poder político municipal y que fuera  denunciado por PinamarInfo, allá por el mes de febrero de este año.


Tras haberle soltado la mano, el “El Japo” prendió el ventilador y acuso directamente sobre la corrupción en la playa al intendente interino, Hernán Muriale, al ex director de Fiscalización, Roberto Baena, y al ex coordinar de Playa, Enrique Arias, "sin perjuicio de la responsabilidad penal de otros funcionarios municipales, como inspectores municipales y policiales que deliberadamente no controlaron a fin de permitir el delito.

La comercialización ilegal en la playa van de desde el chantaje y amenazas, pasa por  las ocupaciones ilegales y según los propios vendedores ambulantes llegan hasta la venta de droga.

Aguirre le dedicó una frase al ex presidente del HCD, Alberto Germain, calificándolo como “un flan político”.  Recordemos que el puntero, oriundo de Florencia Varela, llegó de la mano de Germain a las esferas municipales más altas. Mientras, y a cambio de retribuí favores “encargándose de apretar a los puesteros que no pagaban”. Pero al  mismo tiempo confesaba que “nunca se quedó con dinero, sólo los presentaba”. Para “El Japo” el depositario de la plata sucia es Muriale y mencionó una suma cercana a los 420.000 pesos que fueron a parar a las arcas de los dirigentes políticos. Además aclaró que “para entrar al negocio tenían que hablar con Quique Arias, que también es el encargado de cobrar”.

Las irregularidades ventiladas por Aguirre desde la cárcel de Ezeiza salpican también a la policía y más específicamente a la DDI de Villa Gessell “Los CDs truchos, las remeras de marcas y esas cosas se pagan en la DDI que también están metidos” declaró “El Japo” a la gente de Infosur.

Más allá de las declaraciones de Aguirre lo cierto es que en marzo de este año el intendente interino, Hernán Muriale, fue interpelado por los desmanes en la venta ambulante de playa que llagó a la trata de persona en situación de vulnerabilidad. Estos eran los puestos de bebidas gaseosas que fueron allanados tras la denuncia del Dr. Lucas Ventoso que involucraba al Enrique Arias, mientras Baena, director del Area, hacia la vista gorda.  Durante la primavera la Asociación Médano Verde que nuclea a los vendedores de playa no comestible denunciaron a Arias y la Asociación Atieme de vender permisos truchos por Intenet ante el Concejo Deliberante. En base a estas denuncias el ex director de Seguridad del Municipio, Jorge Van Der Gothe, elevó una denuncia a la Fiscalía de Pinamar luego que el tema se expusiera en el Foro de Seguridad.  La periodista Mariana Dufour fue llamada a declarar esta semana ya que sus notas en Semanario Pionero fueron las que reflejaron la venta de permisos truchos.

Pese a todo las denuncias y renuncias, la playa pinamarense continua siendo “un viva la Pepa”. Arias fue alejado de Fiscalización y reubicado en la Guardia urbana que ahora se encargará además del control de la venta ambulante. Cambio oportuno, si los hay. Por otro lado la disputa territorial entre Martin Cigarreta, quien tuvo la venta de helado la temporada pasada, con un testaferro de Jorge Liberanome, el ñoqui del Senado que agrediera a los periodistas de CQC aquel fatídico 2 de abril, se recrudece. Liberanome quiere aterrizar en la playa sea como sea.

Pero el jefe que todo lo puede sigue siendo Blas Antonio Altieri. Pese a las denuncias realizadas por el hoy concejal de la UCR, Lucas Ventoso, sobre los puestos ilegales de venta de pirotecnia en las propiedades del intendente destituido, el actual director de Fiscalización y sagas contador, Leandro Sarobe, mira para otro lado. No hay manera que el funcionario haga cumplir las normas vigentes. Según la ordenanza N° 4231/12 se prohíbe la venta de pirotecnia en locales transitorios en todo el Partido de Pinamar. También se produce la violación a las normas nacionales sobre seguridad pirotécnica, disposición 862/10 del RENAR.

Las trasgresiones en la playa top de la costa atlántica van de lo grotesco a lo bizarro y los personajes en cuestión aseguran robar para la corona que hoy se encuentra dividida políticamente. Pero a la hora de cerrar los negociados la pirámide es una y el vértice es siempre el mismo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario