El tratamiento fue extenso y se planteó un cuarto intermedio. Los ediles del FpV expusieron una serie de consideraciones en lo que hace al servicio y plantearon un incremento menor que no fue aceptado ni por la empresa ni por los ediles.
El concejal Bermudez solicitó que en el futuro se sumara al expediente los balances de la empresa que hacen a la estructura de costo.
El responsable de la empresa, Eduardo Vecchio, explicó en el cuarto intermedio los motivos empresariales que motivan el aumento para garantizar la operatividad y la prestación del servicio. También aclaró que él evitó que el sindicato se levantara y fuera al Concejo a exigir un aumento. La tarifa no se modifica desde el 2015 y el “boleto turista”, que se fue a 15 pesos en las dos primeras secciones y a 20 a partir de la tercera, es quien subsidia la tarifa local. Esta situación particular de Pinamar hace que un futuro cuando se universalice la implementación de la tarjeta SUBE no se pueda sostener porque el Software no distingue entra local y turista.
Entre tanto aquellos que posean los descuentos a nivel nacional no acceden con la tarjeta local.
Juan Ocampo planteó una variable de cincuenta centavos en la segunda y tercera sección. Por su parte Vecchio accedió pero propuso incrementarlo en boleto turístico de la primer sección y los ediles aceptaron la modificación.
En los próximos meses se implementará la aplicación en los celulares para seguir el recorrido y la cartelería con los horarios en las paradas, propuesto por Galarza.
El debate llevó a un duro cruce entre los concejales De Vito y Estanga. De Vito tomó la palabra en primer lugar y a favor de la empresa acusó Estanga de haber no estudiado el punto no proponer una propuesta serie. La disputa habia comenzado en la labor legislativa, así lo expresó el edil de Pro. Por su parte Estanga le recordó que no le faltara el respeto al cuerpo y a la comunidad y que fuera a trabajar. Las ausencias del edil no son un secreto para nadie.
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