¿Honorable? Pero sin quórum

CONCEJO DELIBERANTE DE PINAMAR

En el día de ayer se debía realizar  la última sesión ordinaria del año, pero la falta de quorum lo impidió. Después de haber esperado los tiempos apropiados que denostarían que los cinco ediles alineados al oficialismo no llagarían a la cita, el concejal Gabriel Vidauli en su rol de vicepresidente del Concejo Deliberante, cumplió los pasos administrativos de formas con la automática apertura y cierre de la sesión.

El orden del día, con catorce puntos a la espera de su tratamiento, programaba para su inicio la entrega de reconocimiento a los concejales salientes que asistieron a las 18 horas, como es habitual cada jueves de sesión, acompañados de sus familiares.

Por otro lado los guardavidas con total puntualidad acudieron a la convocatoria para escuchar a Fernando Espinach, secretario adjunto de la Asociación de Guardavidas de Pinamar, que debía tomar la banca del vecino para exponer el proyecto de municipalización del servicio de guardavidas. Habiendo cumplimentado todas las formas que norma el derecho a acceder a la banca del vecino, por parte de los integrantes de la Asociación de Guardavidas, el punto no constaba en el orden del día. Pero los ediles, Mercedes Taurizano, Roberto Porretti y Vidauli habían asegurado en la mañana que lo solicitarían sobre tablas. En contrapartida y circunscribiendo al tema, un grupo de concesionarios de playas también se hicieron presentes en el Concejo.

Gabriel Vidauli, la secretaria del cuerpo, Susana Murada
y la secretaria del bloque, Edith Poyur.

Pero todos se quedaron con las ganas porque los concejales: Edgardo Paso, Martín Rapalino, Pedro Elizalde, Gladis Barce y el presidente Alberto Germain no fueron. La falta mayor estuvo encarnada por el presidente ya que al  abandonar el concejo no podía ignorar la venidera falta de quórum con su inasistencia. Los  dos mencionados en primer lugar, Paso y Rapalino tenían una causa justificada. En el caso de Elizalde estaba fuera de la ciudad. Y Barce anunció a la una de la tarde por nota que tenía otro compromiso.

Mercedes Taurizano y su padre. 

Roberto Porretti, la plaqueta recordatoria se la entregaría
su hijo.