viernes, 28 de febrero de 2014

Muriale: “Nos defraudaron en nuestra buena fe”

EN UN TOTAL AUTISMO, MURIALE RESPALDÓ A SU FUNCIONARIOS, EN EL CASO DE RODRIGUEZ ES PORQUE SE JUBILA EN UN MES 

El concejal de UCR, Lucas Ventoso, abrió la sesión extraordinaria luego que el presidente del HCD, Maximiliano Santini, expusiera las formas para llevar adelante una sesión armoniosa.

Ventoso destacó las anomalías más sobresalientes del  expediente que se inició con la solicitud apócrifa a nombre de un organismo nacional. Por otro lado esa tramitación dio origen a la denuncia penal iniciada por el Ministerio de Salud de la Nación en la persona de Otto Alberto Orsigher, sub administrador  de la ANMAT, en el cual se “denunció la falsificación de documento público y el accionar delictivo en el uso del buen nombre y honor del funcionario citado”.



De acuerdo a las actuaciones administrativas que consta en el expediente se reflejó que Juan José Rodríguez, secretario de Gobierno y Seguridad, no podía ignorar, por error, por omisión, o por defraudación, el fragüé de la documentación presentada. Y las preguntas de rigor que se instalaron fueron: “¿Con quién se ha reunido Rodríguez? ¿En qué términos se han reunido? ¿Dónde y con qué objeto?  ¿Por qué,  o está mintiendo un funcionario del Ministerio de Salud de la Nación? ¿O está mintiendo un funcionario municipal? No hay otra alternativa” sentenció Ventoso.

Muriale aplicó la clásica “No hay mejor defensa que un buen ataque” y descalificó a Ventoso ubicándolo en el papel de denunciante. Dijo que antes de la denuncia del concejal, el Municipio ya se había procedido sobre el parador ilegal. Esto no es de todo cierto. El parte de Fiscalización a cargo del agente Videla del día  6 de enero, solo advierte, a los responsable del parador, que se abstenga de vender bebidas de una manera muy capciosa. Es decir que lo que observa Fiscalización y su subsecretario es solo la venta de jugos, y no, todas las otras irregularidades que incluyeron hasta conexiones ilegales de energía eléctrica. Inclusive más adelante, el intendente dijo que la visita de los inspectores al parador era por la excelente cobertura de la playa.  Incorrecto. Leandro Sarobe, subsecretario de Fiscalización, lo contradijo y aclaró que la presencia del agente se debió a una denuncia telefónica. Recodemos que por esa fecha la historieta del “parador  de  Liberanome” ya era un secreto a voces. Este personaje que acosó a periodistas parece tener mucha influencia sobre Rodríguez (ver más adelante).

“Jamás le pedimos ningún tipo de acreditación a ningún organismo nacional o provincial que venga a hacer una promoción” dijo Muriale y mencionó los partes de fiscalización (existe uno solo) como método de control.

Los ediles invocaron el artículo 15 del Procedimiento Administrativo donde se exige la acreditación de personería para iniciar cualquier trámite en el Estado municipal. A ello, el intendente aplicó su estrategia que se corresponde más con el potrero que con la administración pública,  y señaló “eso no lo hace nadie”. Y como nadie lo hace él tampoco.  “Confiamos en la buena fe”, agregó Muriale. Cortó el hilo por lo más delgado y aclaró que dio la orden en mesa de entrada que “a partir de ahora todos los expedientes y presentaciones que se hagan se acredite la titularidad”.
Al finalizar su primer intervención el intendente apuntó que “lo único que se ha logrado con esta interpelación son los titulares en los diarios nacionales” y mencionó la nota publicada en “La Nación”.

“Estamos reunidos para ver si existe complicidad en esta acción. Porque no puede decir el secretario, de Gobierno, Juan José Rodríguez, que no se acuerda quién le entregó la nota” (de ingreso) le reprochó la concejal radical, Mercedes Taurizano.  

Sarobe aclaró que sí se reunió con Enzo Calabrese, el que supuestamente inició los trámites, a fin de cumplimentar lo expresado por otra nota lubricada por un tal Cingolani (que no existe). Esta es  otra adulteración de documentación pública. El subsecretario aclaró que era “para unificar las acciones con Playa Naranja” que es el parador del Dirección de Deporte. Cunado Sarobe converso con Calabrese la denuncia de Ventoso ya existía. Y siguió adelante con las acciones como si nada.

Por su parte Rodriguez  con un autismo elocuente dio lectura a la denuncia formulada por el Municipio, en base a la realizada por la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica). El funcionario pretendió demostrar las acciones realizadas ante el fraude. Pero esto tampoco fue así. Siendo que el intendente había recibido una carta documento de la repartición en cuestión, y manera indolente radicó la denuncia solo después de la reunión en el Concejo ante el reproche de los concejales por falta de medidas. Esta situación fue expuesta por la concejala Rosario Avendaño (ProPin) y desmentida por Muriale en plena sesión. La edila También dio lectura al artículo 56 de LOM donde dice que los permisos de playa  deben pasar por el Concejo. La respuesta del intendente en defensa a la norma, que no se cumple, fue: “Eso no lo hizo ningún gobierno. Ni este, ni el anterior, ni el del medio”.  

El concejal Juan Ocampo  (FpV) pidió que “no se minimizaran las cosas en objeción a la liviandad de Muriale”. Se refirió a las personas en cuestión: Calabrese, Singolani y Liberanome. Y cuestionó el escenario que se pretende instalar: “como si esto fuera una escena creada por los concejales opositores para hacer tambalear la figura del intendente” subrayó Ocampo. Entre las preguntas el concejal del Frente para la Victoria mencionó el croquis sobre la ubicación del parador. Seis líneas rectas “sin técnica y sin sello de Obras Públicas, como sí lo tiene la plancheta de Playa Naranja que consta en el mismo expediente”. Resaltó, además, el pedido de luz ante la CALP, realizado por Jorge Liberanome a nombre del IPS. También mencionó las coincidencias en las fechas de presentaciones de Calabrese y Cingolani con el único parte de inspección.

Ventoso cerró la exposición  exigiéndole a Muriale un gesto político que le muestre  a la comunidad que él no tiene nada que ver con las irregularidades y el fraude. Para ello debía separar del cargo a los funcionarios responsables. Muriale le respondió que “no”. Y uno de los argumentos fue que Rodríguez se jubila en un mes y no iba a manchar su nombre.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario