SE LLEVÓ A DELANTE LA PRIMERA SESIÓN EN EL CONCEJO CON
MODALIDAD MIXTA: REMOTA Y PRESENCIAL, DE
ESTA MANERA SE PRESERVA A LAS PERSONAS DE RIESGO QUE INCLUYE A LOS TRABAJADORES
Este último viernes a partir de las 9 de la mañana
se realizó en el Concejo Deliberante la primera sesión de modalidad mixta que implicaba: los
concejales Roberto Brandalisio y Emanuel Carlau de Juntos por el Cambio, Gabriela
Ferretti de ProPin y la inclusión tardía de Laura Vigliecca del Frente de Todos, se
conectaron de forma remota y el resto de los ediles de manera presencial en el
recinto.
Los ediles llegaron a concretar esta modalidad luego de meses
de discusión con la oposición de la concejala Laura Vigliecca que no aceptaba
la manera remota, siendo que esta es necesaria para
cumplir con el aislamiento social. Luego de algunas modificaciones a la
ordenanza que regula el funcionamiento parlamentario en estos tiempos de
pandemia con el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), aunque
Pinamar se encuentra en etapa de Distanciamiento Social Preventivo y
Obligatorio (DISPO), algunos ediles se pusieron firme ante la negativa de la
edila, sobre todo por el aumento de casos positivos de Covid 19 que se registraron
en los últimos días. De esta manera se dio lugar a la nueva modalidad y por ende la
salvaguarda tanto del personal como de los concejales que se encuentran dentro
del segmento de riesgo. Lo curioso fue que Vigliecca utilizó la forma online.
A pesar de no haber tantos puntos en el orden del
día, la sesión comenzó movidita al tratarse los temas de la Comisión de
Interpretación de Asuntos Legales y Especiales que preside la concejal de
Juntos por el Cambio, Camila Merlo. El tema se refería a un proyecto de
ordenanza que incluía modificación en la legislación de Audiencia Pública para incluir la modalidad
virtual, en función la audiencia pública que debe llevarse a cabo en relación a
la modificación de la tarifa del servicio de agua y saneamiento cloacal que brinda CALP.
Los concejales de la oposición solicitaron el pase a
comisión por no cumplir con las tres firmas requeridas para el tratamiento en
sesión. Y entonces la pandemia se volvió a ser presente. La concejal Merlo
asumió el error, por un lado, aunque aclaró que partir que los ediles no
concurren a comisión y las firmas son online se presentó un mal entendido con concejales propios y ajenos. Merlo también aludió a cuestiones dilatorias con
fines políticos y arremetió contra Ferretti. Por esta razón los puntos
siguientes que versaban sobre el mismo tema y con las mismas falencias en cuanto a las rubricas, también fueron
pasados a comisión.
Pero la revancha no se hizo esperar y cuando
llegaron los puntos de la Comisión de Planeamiento, en el tratamiento de la
Casa Robette (declarada de Interés Municipal, los ediles de Juntos por Cambio
en mayoría, y sin necesidad del doble voto (porque Vigliecca estaba ausente) rechazaron
el proyecto que si bien era una ordenanza, Ferretti aclaró la voluntad de
pasarlo a comunicación con algunas variantes. Pero todo fue inútil la decisión
estaba tomada y la desaprobación se hizo escuchar en el recinto.
Es dable aclarar que Merlo nunca estuvo de acuerdo con el proyecto.
La ordenanza solicitaba un proyecto urbanístico para
la puesta en valor de la zona comprendida por las calles Av. Robette, Av. Juan
de Garay y Biarritz teniendo en cuenta los siguientes lineamientos: resaltar la
importancia cultural de la Casa Robette; el mantenimiento de la arboleda
existente; fomentar el desarrollo de Actividades recreativas al aire libre; el
acceso peatonal hacia los servicios de playa y desde ellos hacia el interior
del ejido urbano.
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