El Concejo Deliberante rechazó, en la sesión especial del viernes y por mayoría, la Rendición de Cuenta. Las manos que se levantaron en apoyo a la actividad económico-financiera realizada durante el año 2014 (administración compartida de Muriale y Elizalde) fueron las de los concejales, Martín Rapallino del MUPP, y el siempre oficialista, Juan José Dos Santos de Kolina.
La Rendición de Cuentas es el acto administrativo mediante el cual los responsables de la gestión de los fondos públicos informan, justifican y se responsabilizan de la aplicación de los recursos puestos a su disposición en un ejercicio económico.
El proyecto de decreto se fundamentó en el incumplimiento de las publicaciones de los decretos y resoluciones en el Boletín Oficial, en los términos que lo exige el Art. 108° inciso 18 de la LOM. "Esta omisión ha hecho imposible el control del accionar de los funcionarios", se expresó en el documento.
Reflejó también las denuncias que constan en Fiscalía realizadas por los propios ediles en la que se expuso las irregularidades en el ejercicio de la administración pública. Y en ese sentido se señaló los expedientes caratulados: “Entre Pinos” de Nicolás Galatti, y “El Hotel El Dorado”, las denuncias de este último involucraban al concejal Dos Santos en la irregularidad con la (no) llegada de efectivos policiales y desvíos de fondos en el marco de la Seguridad. Ambos expedientes fueron solicitados por presidencia al DE sin que estos fueran remitidos.
En el tercer considerando se indicó la falta de compromiso para hacer eficiente la recaudación que está por debajo de lo que efectivamente se cobró, en concepto de Tasa de Seguridad e Higiene, Derecho de Publicidad y Ocupación de Espacio Públicos; Derechos por el soporte de antenas, infracción a las obligaciones fiscales y el canon por el uso de la Terminal de Ómnibus.
Se observó además una sub-ejecución de las partidas presupuestarias principalmente en aquellas destinadas a la inversión en infraestructura.
Se marcó la descapitalización significativa del Municipio sobre los activos, ya que al inició el año existía un saldo inicial de 294 millones, mientras el saldo final fue de 248 millones de pesos. En el caso de la evolución del pasivo (folio 218) arrojó un saldo inicial de 41 millones y al finalizar el ejercicio dio como resultado 55 millones, muestra de un considerable de un incremento en los activos.
El incremento de la deuda flotante de 29 millones 600 mil pesos fue otro de los argumentos.
El proyecto destacó también la crisis administrativo- financiera de la Municipalidad al estar íntimamente relacionado con el apartamiento de los objetivos programáticos, presentados con el Presupuesto 2014. La información suministrada por el DE da cuenta del aumento exponencial de las partidas destinadas a sueldos en desmedro de las inversiones de infraestructura.
El primero en tomar la palabra fue el concejal de ProPin, Martín Viotti, quien se tomó su tiempo para explicar los detalles de los argumentos expuestos en el decreto, el cual resumió en tres puntos base con cifras que resultaron ilustrativas al momento de la explicación.
“Desprolijidad e incapacidad”, fueron los calificativos del edil para el gobierno del MUPP que rige los destinos de Pinamar desde 2010 con tres administraciones diferentes. Al cierre de su alocución el concejal de la fuerza vecinalista planteó la incorporación de una norma que contemple una auditoria externa anual independientemente del gobierno de turno.
Juan Ocampo (FpV), Edgardo Paso (FR) y Lucas Ventoso (UCR) formaron parte de la partida de oradores que justificaron el rechazo.
Paso, aprovechó la circunstancia política para pasarle factura a la Provincia y a la Nación, en lo que el concejal interpretó como un desdén hacia Pinamar en cuestiones financieras: “Nuestra comuna no les interesa”, dijo el edil del Frente Renovador. El 30 por ciento del Presupuesto municipal corresponde a coparticipación provincial y fondos nacionales, el 70 por ciento son recursos propios. Pero en el caso del Hospital Comunitario el 85 por ciento de su presupuesto es por coparticipación federal y el resto son recurso municipales.
El pre-candidato a intendente del Frente para la Victoria, Juan Ocampo, dijo: “Tenemos una deuda flotante que ya no es flotante se hunde”
En el desglose el edil tomó dos áreas como referencia: Secretaría de Turismo y el área de Zoonosis, que depende de Salud, respecto de las compras en el ítem insumos de limpieza. La idea fue mostrar cómo en las compras más sencillas el Municipio es ineficiente.
“No tenemos información”, subrayó Ocampo, y agregó: “Que el Presupuesto se arma de atrás para adelante expresado en números redondos de las partidas de cada Secretaría”. Es decir que Hacienda asigna el presupuesto para cada área, en vez de que cada una de ellas elabore las partidas programáticas acorde a sus necesidades.
Por su parte, Lucas Ventoso apoyó la iniciativa de Viotti en cuanto a la implementación de la auditoria externa. A lo cual agregó la particularidad de un organismo oficial para incluirlo en el Código Tributario: “Es un paso adelante en la transparencia y calidad administrativa”. El concejal, y pre-candidato a intendente de la UCR, se refirió a “la realidad financiera del Municipio y la tendencia que tiende a empeorar. Cualquier administración es inviable con el 70 por ciento de su recaudación destinada a sueldos y horas extras. Esta es una decisión política realizada por el enemigo de la administración pública”.
Luego de un cuarto intermedio, en cual se realizaron algunas modificaciones, se votó el proyecto de decreto, con la ausencia del concejal Alberto Germain. El resultado fue de 9 votos positivos a favor del proyecto de rechazo y dos en contra, Rapallino y Dos Santos.
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