INTERPELACIÓN AL INTENDENTE MARTÍN YEZA POR LA OBRA
PÚBLICA CENTRALIDAD PINAMAR. LOS FUNCIONARIOS SE PRESENTARON SIN EL INTENDENTE
Y LAS RESPUESTAS NO SATISFICIERON A NADIE
Con la presencia de un importante número de
empleados municipales en horario de trabajo, inició a las 9 y 15 la sesión
especial para interpelar al Intendente Martin Yeza, quien no se presentó a la
sesión, en su lugar estuvieron la secretaria Mila Gomez Beret, el director Sebastián
Cúfari del área de Planeamiento, el secretario de Gobierno Guillermo Benítez y
el jefe de Gabinete Federico Panzieri.
El concejal Gregorio Estanga tomó la palabra para en
primer lugar repudiar lo que llamó un fake news llevado adelante por un
periodista ligado a Yeza. Fake news son
un producto pseudo periodístico difundido a través de portales de noticias, y
redes sociales cuyo objetivo es la desinformación deliberada o el engaño.
También cuestionó la ausencia de Yeza sobre todo
porque se dedicó a cuestionar la denuncia por distintos medios y hoy no estaba
presente.
Estanga prosiguió con análisis integral proceso de licitación
y ejecución de la obra comenzó con las preguntas apegándose estrictamente a la documentación
que se desprende del expediente.
La primer pregunta se centró de cómo se pasó de un
presupuesto inicial de 19 millones a 23 millones para alcanzar los 33 millones definitivos
sin que hubiera alguna justificación en el expediente.
La Arq. Mila Gómez Beret respondió que la diferencia era resulta de un enorme y
largo proceso en un convenio con la Nación, en el que el primer paso fue un
anteproyecto y que luego de ese proceso se llegó a los 33 millones. El registro
de eso está en la nube que comparten todas las dependencias del Estado, a la
que tienen acceso y saben todos los convenios que cada Municipio firma. Además
explicó que más allá de los expedientes locales, existe otro en el Ministerio
donde también se registró este proceso, desde los croquis a mano alzada hasta
el proyecto final. Que por omisión no se adjuntó al expediente local, pero que
sí existe y de hecho cuando Auditoría General de la Nación se acercó a ver todo
trajo copia de los expediente de Nación.
Guillermo Benítez aclaró que es cierto que hubo una
falla al no agregar en el expediente presente, pero que no obstaculiza lo
logrado en el mismo, porque todo está en manos del Ministerio y que la
documentación respaldatoria que solicita el edil está agregado en el expediente
madre (que es el que origina el giro de fondos).
Por otro lado Federico Panzieri explicó que existe un último
órgano de control, ya que la Dirección Nacional de Arquitectura y la Dirección
de Revitalización de Espacios Céntricos, analiza toda la documentación antes de
publicar la licitación en el Boletín Oficial y que el HCD puede solicitarlo al
Ministerio.
Estas respuestas no conformaron al edil quien insistió
también el proyecto de las obras los cierto que tal como lo explicara la secretaría
no existe documentación en los expediente municipales. Asimismo tampoco los
planos de obras ya que la misma comenzó sin que estuvieran a disposición.
Tampoco hubo un plan de obra ni por parte de la empresa, ni por parte de la municipalidad.
La Comisión evaluadora tampoco fue conformada y
quedó en evidencia en faltante del dictamen legal, además del técnico y
financiero.
Estanga también resaltó una curiosidad dada entre la
oferta de las dos empresas Ashoka e Indal. Ésta última presentó un presupuesto
en el que cada ítem estaba por encima en un cinco por ciento exacto, inclusive
tuvo lo mismo errores que el de Ashoka, como el ítem de la restauración de la obra
del Pájaro Gómez en que pasaron la suma irrisoria de 3000 pesos o el
desmantelamiento de la radio de Badia. Panzieri negó esta insinuación a la que
llamó una posible “cartelización” y dijo que “en la Municipalidad de Pinamar la
licitaciones eran transparentes”.
Los funcionarios justificaron todo en el “ajuste
alzado” una modalidad que permite las compensaciones en las obras, pero no por
ello es un todo vale en la elaboración de los ítems.