“SE BUSCAN EXPLICACIONES, RESPONSABLES Y QUE LAS COSAS SE HAGAN CORRECTAMENTE”
Durante años se investigaron hechos consumados de los funcionarios públicos con la única finalidad de utilizar estas irregularidades para desestabilizar y obtener rédito político. Interpelaciones seguidas de comisiones investigadoras desembocaron en constantes crisis políticas. Desde PROPIN se entiende a la interpelación como una instancia que posibilita obtener explicaciones, determinar responsables y exigir que las cosas se hagan correctamente.
El lunes 9 se realizará una sesión extraordinaria en el Concejo Deliberante donde los ediles evaluarán si hay razones suficientes para interpelar al intendente interino Pedro Elizalde, por observarse irregularidades en la recaudación proveniente de los derechos por publicidad.
Para entender por qué se pretende llegar a la instancia de interpelación es necesario informar sobre los antecedentes a la misma. Durante la primer quincena de enero algunos concejales advierten que la Municipalidad de Pinamar y con ello toda la comunidad estaba perdiendo grandes sumas de dinero en recaudación provenientes de los derechos por publicidad, a partir de constatar una Planilla oficial donde mostraban que las firmas o empresas autorizadas por el Municipio para realizar sus promociones, eran muy pocas en relación a lo que se percibía en la realidad. En aquel entonces, la recaudación apenas superaba los 4 millones de pesos cuando se estima que mínimamente debe cuadriplicar esa suma.
A partir de allí, concejales -entre ellos los de PROPIN- hicieron consultas en el Ejecutivo al respecto y se ofrecieron para colaborar intensamente en agilizar los mecanismos de fiscalización para maximizar la recaudación. De estos encuentros se realizaron dos con el Intendente, uno en la Municipalidad y otro, el más importante, se llevó a cabo el 20 de enero en instalaciones del Concejo Deliberante donde Pedro Elizalde concurrió acompañado de integrantes de su gabinete. Allí, Elizalde reconoció que existieron situaciones irregulares y acordó afectar a toda la guardia urbana para que fiscalice con la coordinación del Director de Fiscalización, Sr. Siste, y con la colaboración de Prensa se fotografíen las infracciones. Nuevamente, los concejales ofrecieron su ayuda, decidiéndose conformar equipos para conseguir el objetivo de una mejor fiscalización y cobro de las publicidades y uso del espacio público.
Agotadas las instancias informales y formales sin éxito, los referentes de la agrupación Propuesta Pinamar no tienen otra alternativa que recurrir a una interpelación ya que no se obtuvieron respuestas y soluciones a lo requerido. Las promesas hechas por el Ejecutivo ante los concejales, de realizar determinadas acciones fiscalizadoras y recaudatorias, fueron incumplidas si se tiene en consideración la magnitud de las irregularidades. A esto se le añade que empresarios aducen haber cancelado sus obligaciones por publicidad a determinados funcionarios, pero esa liquidación no está registrada en las arcas municipales.
En definitiva, se descarta de plano cualquier maniobra desestabilizadora de parte de la Agrupación pero tampoco se puede mirar para otro lado ante hechos que son graves, manifiestos y que afectan el erario público, en detrimento de todas las obligaciones que debe afrontar el Estado; entre ellas la salud, los salarios, la seguridad, etc.
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