El grupo de “Mujeres al Frente” se reunió el sábado primero de julio de 2017, en sus encuentros habituales de los sábados. En esta oportunidad, las integrantes trataron específicamente la convocatoria del Concejo Deliberante, en el marco de la Mesa de la Mujer, que tuvo como disertante al ex juez Dr. Rubén Mario Sarlo.
Las asistentes a la charla sobre violencia intrafamiliar hacemos saber a la comunidad nuestro malestar y disconformidad con la exposición de Sarlo, que inició su alocución con una expresión de descrédito hacia los políticos: “Los políticos no sirven para nada” (sic).
Luego prosiguió con la narración de una experiencia judicial propia, en la que resaltó las costumbres tribales de la migración, para llegar, luego de una exagerada generalización, a la conclusión de que la inmigración había conducido a un debilitamiento del entramado social, terminando su argumentación con lo que consideramos una ofensiva descalificación del inmigrante.
A continuación, le tocó el turno a los docentes y a un conocido dirigente sindical. El relato pretendió hacer cargo a los primeros de la inacción y la “no prevención de la violencia intrafamiliar”. Para llegar a esa conclusión, Sarlo se remitió a una vaga declaración del gremialista,en la que habría dicho que los docentes tenían mucho trabajo como para exigirles más. A esa altura, el discurso del juez ya ostentaba una clara intencionalidad. Las docentes presentes en el recinto le aclararon que en las escuelas se trabajaba en ese sentido de acuerdo a las leyes y normativas vigentes.
El ex juez insistió varias veces en que su exposición “no era política”, pero en todo momento y contradiciendo sus propias palabras, su retórica solapada expresaba una postura que rayaba lo grotesco, subestimando la inteligencia de las presentes, sin proponer una sola reflexión que echara luz sobre la temática que nos convocaba. Por el contrario, se limitó a sostener -con una tozudez soberbia y con una prepotencia descalificadora con fuerte contenido ideológico- un discurso eminentemente político.
El juez fue crítico con todos y todas, salvaguardando, eso sí, a la casta de jueces. Pero no respondió ninguna de las inquietudes de las interlocutoras en relación a la violencia intrafamiliar y el rol del poder judicial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario