viernes, 14 de junio de 2019

Una de las patas de la construcción


ENTREVISTA  A  ANIBAL SOSA, SECRETARIO GREMIAL ADJUNTO DE UOCRA

La construcción es una de las dos actividades más importantes de Pinamar. Según el INDEC “el acumulado del primer cuatrimestre de 2019 del índice serie original presenta una disminución de 10,3% respecto a igual período de 2018”. Pinamar no es la excepción, en años anteriores sostuvo los puestos de trabajo gracias a la construcción y el auge de Costa Esmeralda, pero la crisis llegó a ese sector también.

Desde el año 1986, Aníbal Sosa, secretario Gremial Adjunto de  la UOCRA Mar del Plata, recorre y supervisa las construcciones en esta región que se extiende hasta el Partido de la Costa. La UOCRA controla tanto las normas de seguridad como las condiciones laborales  de los obreros contratados en las obras públicas o privadas, si bien las multas o infracciones están a cargo del Ministerio de Trabajo.

Sosa cuenta que “en Pinamar cambió la demanda constructiva,  si se toma estadísticamente, en la actualidad  se cuentan más metros a construir que años atrás. Pero si se evalúan las construcciones de manera  individual, hay menos edificación de chalet o viviendas unifamiliares y más obras de envergadura. De allí que la cantidad de metros no coinciden con la cantidad de obras. Por lógica el sector no está bien y se observa mucha desocupación”.

En años anteriores quien absorbía la mano de obra pinamarense era la localidad  vecina Costa Esmeralda (Partido de la Costa), un fenómeno inmobiliarios con características de country,  en un año los indicadores de la construcción llegaron a cuatrocientas obras, hoy, la actividad se reduce a cuarenta.  

Los profesionales pinamarenses también resisten la recesión ya que el sector privado que invierte en Pinamar por lo general trae a sus propios arquitectos.

En cuanto a las seguridad, Sosa indica que “la UOCRA invierte en educación y en la cede educativa local se reciben en distintas disciplinas de la construcción entre doscientos y doscientos cincuenta estudiantes por año escolar. La seguridad en la obra se ve en todas las modalidades y hay grandes avances aunque no alcanza”, subraya el dirigente gremial. Al mismo tiempo señala que en la disciplina carpintería hay varias mujeres y que la más concurrida es la de técnicos en refrigeración.  
Sosa cuenta que días pasado se había reunido con el Intendente y hablaron sobre la ordenanza municipal de “verificación técnica de edificios” en el marco de la seguridad, norma que no solo habilitaría puestos de trabajos, sino que resguarda a la gente de imprevistos edilicios producto del degaste de los años. Para Sosa esta es una ordenanza sumamente importante y no entiende porque aún no se puesto en practica.


En Mar del Plata existe el “Foro de la Construcción” y está compuesto por profesionales ya sean arquitectos ingenieros, maestros mayor de obra, agrimensores, cosntructores y corraloneros. Este foro se creó años atrás cuando en la Perla del Atlántico  se había suscitado la falta de conexiones a la rede de gas sobre una gran cantidad de edificios terminados. Sosa considera oportuna la creación de ese foro en Pinamar para tratar todo lo referente a la actividad, siendo que es uno de los principales recursos económicos de nuestra localidad.

Los jornales en la construcción según el régimen estipulado en la Ley 2.250 se cobran el  valor hora por quincena y existe un fondo de desempleo. Es el gremio con más afiliados, las altas de se producen de marzo a diciembre y bajan en enero y febrero producto de la actividad turística. El Secretario Gremial Adjunto manifiesta que a través  de los años hubo un cambio de mentalidad porque se profesionalizo la tarea del obrero.

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